Elissa Venizelos

DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA

Es una chica de naturaleza alegre y servicial, cariñosa y sumamente risueña, siempre preocupándose por los demás antes que por ella misma. Normalmente se olvida de sus problemas e intenta ignorarlos pues prefiere ayudar a los demás antes que ayudarse a sí misma. Para que las personas más cercanas a ella no sepan que algo le ocurre, suele tapar su estado de ánimo mostrándose siempre con una sonrisa, aunque sea falsa, no le gusta que se molesten por ella; además así consigue que, en cierto modo, sean felices. Es algo melancólica, aunque ya no recuerda su pasado, siempre que mira al mar sabe que está olvidando algo importante.

HISTORIA

Desde muy pequeña Elissa ha convivido con una grave enfermedad; a medida que pasaban los años su cuerpo menos se movía. Comenzó con las piernas, que a tierna edad le obligaron a estar sentada en una silla de ruedas. Fue un duro golpe para ella ya que le encantaba nadar, era como si fuera un pez en el agua, se encontraba en su territorio. Desde muy pequeña iba a la playa cercana a su casa para meterse en el mar y nadar hasta que era la hora de cenar o el sol dejaba de iluminar.

Cuando sus piernas ya no podían sostenerla por falta de fuerza se volvió una niña triste que sentía envidia de todos los que le rodeaban. Preguntaba constantemente a Dios porqué la castigaba de aquella manera. ¿Acaso había sido una niña mala?.

Los años pasaban y cada vez sentía menos el cuerpo. Un amigo que había tenido desde muy pequeña la iba a visitar todos los días y aunque intentaba disimularlo veía la tristeza en sus ojos. Tras cumplir los 21 años ya lo tenía decidido. Ya no podía mover ningún músculo de su cuerpo. apenas podía hablar y dependía completamente del resto de personas que la rodeaban. No quería seguir viviendo, es por eso que consiguió convencer a su amigo para que la llevase al mar y dejase que el agua se la llevase. Él al principio se mostraba reacio pero ella la convenció diciéndole que estaba viviendo un auténtico infierno, no sólo ella sino los demás que tenían que estar pendiente de ella.

Y así fue como se sumergió en el agua y se dejó llevar por las corrientes. Cuando despertó se encontró en un cementerio. Al principio se asustó pero comprendió enseguida que había perecido. No sólo había muerto sino que había recobrado la total movilidad de su cuerpo. Por una parte estaba triste por alejarse de sus seres más queridos pero se alegraba de no tener que seguir viviendo el infierno que había vivido hasta entonces. Comenzó a correr por el cementerio. No quería parar. No supo cuántos días estuvo corriendo hasta que llegó al lugar más hermoso que habían visto sus ojos. Una zona llena de agua. Para ella todo un paraíso.